Hechos cometidos por sicarios, ajuste de cuentas, enfrentamientos entre bandas y diversos hechos relacionados con el oscuro negocio de la venta de estupefacientes en muchas ciudades del país. Un drama que no para de crecer.
La cifra de asesinatos cometidos por integrantes de organizaciones de narcos en distintos puntos del país no para de aumentar, y en el final del año el promedio diario presenta picos de hasta 30 homicidios, en el marco de casos cometidos por sicarios, ajuste de cuentas, enfrentamientos entre bandas y diversos hechos relacionados con el oscuro negocio de la venta de estupefacientes, con un claro problema central en la ciudad de Rosario, aunque con situaciones en muchas ciudades del país.El dato fue proporcionado por Claudio Izaguirre, titular de la Asociación Antidrogas de la República Argentina (AARA), relatando a Diario Popular que "a comienzos del año pasado, teníamos picos en Argentina de cinco o seis crímenes narco por jornada, sin embargo este año comenzó con un promedio más alto, ya que debimos lamentar 10 hechos de extrema violencia con fallecidos, y estamos terminando el 2023 con una cifra mucho mayor de unos 30 hechos por día, en su enorme mayoría víctimas de ataques cometidos con armas de fuego".
Tras el drama con el policía asesinado en un hospital, el especialista sostuvo que lo sucedido actualmente excede a Rosario, ya que en muchos puntos del país también hay muertes violentas todos los días, por disputas territoriales y comercialización de estupefacientes. "Lo que venimos observando con absoluta claridad es que la virulencia en los hechos es cada vez peor", dijo Izaguirre.
El experto indicó que "el tema por peleas narcos que terminan con muertos se va sumando día a día, hoy estamos llegando a 30 cada jornada. Es realmente inadmisible. Tenemos que reaccionar y enfrentar este problema gravísimo. Argentina tiene un nuevo problema con el sicariato ya instalado. Por ejemplo, funcionan escuelas de sicarios. Enseñan cómo actuar desde el sicariato", precisó el titular de la Asociación Antidrogas de la República Argentina.
"La vida vale muy poco, ya que por unos miles de pesos se comete cada crimen. Les llaman gatilleros. Van en moto y las bandas usan muchos menores para enseñarles, se estudia el objetivo y finalmente se ejecuta. Ocurre a lo largo y ancho del país. Este asunto de la muerte por lo que llama la prensa ajuste de cuentan no para de crecer", dijo Izaguirre, sumando que "debemos mirar lo ocurrido en Santa Fe, donde se reclaman más acciones para frenar las ejecuciones de personas por las guerras narco".