La Selección de Portugal derrotó 2-0 a la Selección de Uruguay en el Estadio Lusail, por la segunda fecha del Grupo H: Bruno Fernandes convirtió los dos tantos de los lusos, que con la victoria se meten en los octavos de final del Mundial. La Celeste deberá ganarle sí o sí a Ghana para clasificar.
El resultado queda grande para lo que fue el trámite del partido, pero en el Mundial, los detalles y la efectividad en las áreas son los que hacen la diferencia. Y en ese sentido, Portugal sí concretó sus chances, a diferencia de Uruguay, que jugó poco y aún así tuvo las ocasiones de gol más claras, pero no las aprovechó.
Ante el gran poderío ofensivo del combinado europeo, Diego Alonso priorizó el orden defensivo y metió una línea de cinco defensores que de entrada plasmó una postura bastante conservadora. Desde el resultado, el plan funcionó durante el primer tiempo porque Portugal manejó la pelota pero no puso en jaque el arco de Sergio Rochet.
Sin embargo, a la Celeste le quedaba lejísimos el área de Diogo Costa. Hasta que en un arrebato individual de Rodrigo Bentancur, que dejó en el camino cuatro defensores y definió al cuerpo del arquero, Uruguay se dio cuenta que podía lastimar. Automáticamente adelantó las líneas, comenzó a presionar más arriba, y pese a que sobre el final de la primera etapa el ritmo decayó, los charrúas se fueron al descanso con buenas sensaciones.
Pero en el complemento Portugal le tiró los nombres encima y a los 10 minutos encontró la ventaja: Bruno Fernandes tiró un centro que Cristiano Ronaldo no llegó a desviar, pero la pelota se metió en el arco uruguayo y significó el primer gol portugués. Al principio pareció ser de CR7, pero tras la repetición se vio que el astro luso no la tocó, y la transmisión oficial se lo dio al volante.
Uruguay también buenos nombres, pero un poco por tradición y otro poco quizás por respeto, recién en desventaja intentó hacerse cargo de la pelota. Y en un aluvión, ya con la delantera renovada con los ingresos de Luis Suárez, Maxi Gómez y De Arrascaeta (por Darwin Núñez, Edinson Cavani y Matías Vecino), Uruguay acarició el empate: primero Gómez estrelló un fierrazo al palo, después al Pistolero le quedó boyando tras un tiro libre al área pero la tiró por al lado del palo, y luego el volante de Flamengo se fue mano a mano pero definió insólitamente mal. Tres clarísimas en menos de cinco minutos.
Ese fue el tren que la Celeste no aprovechó. Porque ya en tiempo cumplido, la gran figura Bruno Fernandes quiso tirar un caño dentro del área y Jose María Giménez, en su intento de cortar, se tiró; la pelota pasó entre sus piernas y le pegó en la mano de apoyo. El VAR llamó al árbitro, y el iraní Alireza Faghani, tras revisarla, compró. Polémico penal, pero en tiempos de revisiones, el criterio del juez marca la diferencia. Sin Ronaldo en cancha, Bruno pateó, lo cambió por gol y firmó su doblete.